ya llovió... ahora más aire fresco

He vuelto de unos días libres del laburo. Menos mal que los chubascos y los vientos se van llevando la mugre del aire y aunque suele no durar mucho ésto del aire fresco en Santiago, es bueno tener estos respiros de vez en cuando. En cuanto a nuestro proyecto, nos han dicho en e-mail de la embajada, que nuestro expediente figura en una lista de espera y que será resuelto de aquí a septiembre de este año. Cuánta espera!!! Cada día que pasa no sé qué pensar, antes estaba todo tan claro, todo se trataba de reunir papeles, de hacer llamados telefónicos, conseguir certificados, fotocopiar otros tantos hasta completar la gran lista de documentos requeridos, todo era bien claro y definido, pero ahora que está todo entregado y nos toca esta angustia de la espera... cuando ya no dependen de ti las cosas y empiezas a sentirte no sé, como inseguro. Puedo confesar que no tengo en realidad un plan b como tal y que talvez debería dedicarle algunos pensamientos, moldearlo un poco, darle esa forma que logré darle al plan a, pero no lo logro, siento que agonizo en la vulnerabilidad de este proyecto, la inseguridad no es tanto por falta de fe, sino más bien en pensar que mi hasta ahora archi bien conocida cotidianeidad va a cambiar y aunque puedo presentir que será para mejor, siento que aún ni siquiera la puedo visualizar. Es tanto el riesgo, es tanto lo que dejas atrás!!